CÓMO AYUDAR A LA TIROIDES
A continuación, te presento los puntos más importantes a tener en cuenta para mantener una tiroides saludable y abordar los trastornos tiroideos de manera efectiva.
EJERCICIO
La T4 se produce principalmente en la glándula tiroides, pero la mayoría de la T3, que es la hormona realmente activa y útil para el cuerpo, se genera en diversos tejidos como el hígado, los riñones, los músculos y el cerebro.
Es como si la tiroides fabricara billetes (T4) que necesitamos convertir en monedas (T3) para poder utilizarlas en las máquinas expendedoras (células del cuerpo). Estos tejidos actúan como “bancos” donde se realiza esta conversión esencial para el funcionamiento adecuado del cuerpo.
Aproximadamente, entre un 15% y un 20% de esta conversión ocurre en los músculos, mientras que cerca del 80% ocurre en el hígado.
Por ello, el ejercicio, especialmente el entrenamiento de fuerza, es fundamental para la salud tiroidea.
Mantener la masa muscular activa no solo facilita esta conversión hormonal, sino que también disminuye la resistencia a la T3, mejorando el metabolismo. A medida que envejecemos, perdemos masa muscular, por lo que es esencial mantenerla activa.
Además, el ejercicio regular disminuye los niveles de cortisol, una hormona vital en la respuesta al estrés pero que, si se encuentra crónicamente elevada, puede ser perjudicial para la salud.
Un exceso de cortisol constante no solo puede interferir con la función tiroidea, sino también incrementar la inflamación y el estrés oxidativo, empeorando los síntomas del hipotiroidismo.
Por tanto, la práctica regular de ejercicio, especialmente el de fuerza, no solo promueve una conversión eficiente de T4 a T3, sino que mejora el estado de ánimo, la calidad del sueño y el bienestar general, ayudando a gestionar de manera más eficaz los trastornos tiroideos.
Aquí puedes ver cómo afecta el sedentarismo a tu tiroides.
CONTROL DEL ESTRÉS
El manejo del estrés es esencial para proteger la salud de la tiroides, ya que el estrés crónico puede aumentar el estrés oxidativo y dañar este órgano.
Para reducirlo, es útil practicar técnicas de relajación como yoga, meditación, mindfulness o respiración profunda, además de mantener una rutina de ejercicio regular.
Además de estas prácticas, es fundamental prestar atención a nuestra «voz interior». Según la psiquiatra Marian Rojas Estapé, el autocuidado emocional es clave para el bienestar. Hablarte a ti mismo de manera positiva y compasiva puede reducir los niveles de cortisol, la hormona del estrés, que en exceso puede afectar la tiroides y la salud en general.
Por ello, es importante rodearte de personas «vitamina» que te hagan sentir bien y dedicar tiempo a actividades que te resulten placenteras.
Un enfoque holístico que tenga en cuenta la conexión entre la mente y el cuerpo, tal como sugiere la Doctora Marián Rojas Estapé, puede ser muy beneficioso para tu salud.
A continuación te facilito los enlaces por si te interesa conocer más sobre la obra de esta gran profesional, doctora en psiquiatría, conferenciante, profesora, investigadora, colaboradora con varias ONG, como Manos Unidas y Fundaciones. Además trabaja en el Instituto Español de Investigaciones Psiquiátricas y es la fundadora del proyecto sobre las emociones, la motivación y el estrés en la empresa.
Para más información sobre el estrés y la tiroides pincha aquí.
HIGIENE DEL SUEÑO
Es vital respetar las horas de descanso, que suelen ser alrededor de 8 horas diarias para la mayoría de las personas.
Durante el sueño, el organismo lleva a cabo procesos de reparación y regeneración, lo que es especialmente importante en personas con trastornos tiroideos.
Además, la falta de sueño puede afectar negativamente las hormonas que regulan el apetito y el metabolismo.
Para ver cómo nos afecta el déficit de sueño, pincha aquí.
EXPOSICIÓN AL SOL
La exposición al sol durante 10-15 minutos en las primeras horas del día es beneficiosa para la absorción de vitamina D, la cual es fundamental para numerosos procesos corporales.
Además, ayuda a regular los ritmos circadianos, mejorando así la calidad del sueño.
Puedes conocer más sobre la importancia de la vitamina D aquí.
EVITAR LOS DISRUPTORES ENDOCRINOS
Es fundamental evitar los disruptores endocrinos, que se encuentran en muchos cosméticos, productos de cuidado personal, alimentos, recipientes, utensilios, productos de limpieza, etc. Estos pueden interferir con el funcionamiento de la tiroides.
Aquí tienes más información sobre cómo nos afectan y dónde encontrarlos.
IMPORTANCIA DE LA DIETA
Es vital seguir una dieta rica en proteínas de alta calidad (huevos, carne, pescado) y en nutrientes esenciales como el yodo, el selenio y el zinc.
También es crucial incluir vitaminas, especialmente la vitamina D y consumir abundantes verduras y frutas que promuevan una microbiota intestinal saludable y aporten antioxidantes y fibra.
Además, mantener buenos hábitos digestivos es esencial. Muchos expertos recomiendan un ayuno de al menos 12 horas entre la cena y el desayuno para permitir que el hígado descanse y se regenere, ya que este órgano desempeña un papel clave en la detoxificación y en la conversión de la hormona tiroidea T4 en T3.
Puedes consultar más información sobre los nutrientes necesarios para tu tiroides aquí y para tu microbiota, en este link, y a cerca de los que podrían perjudicar a tu tiroides en este.
CUIDADO DEL HÍGADO Y AYUNO MODERADO
El hígado desempeña un papel crucial en la conversión de la hormona tiroidea T4 en su forma activa, la T3. Aproximadamente entre el 75% y el 80% de esta conversión ocurre en el hígado, gracias a la acción de la enzima deiodinasa. Esta conversión es esencial para que el cuerpo pueda utilizar eficientemente las hormonas tiroideas y mantener un metabolismo adecuado.
Además de su papel en la conversión hormonal, el hígado es el principal órgano de desintoxicación del cuerpo. Procesa y elimina toxinas, regula el metabolismo de la glucosa, grasas y proteínas, y mantiene el equilibrio general del organismo.
Una alteración en la función hepática puede interferir no solo con la conversión de T4 a T3, sino también con la salud metabólica y sistémica en general.
Para mantener el hígado en óptimas condiciones, es fundamental adoptar una dieta equilibrada y rica en nutrientes esenciales como el yodo, el selenio y las vitaminas.
También es recomendable evitar el consumo excesivo de alcohol, alimentos ultraprocesados y otras sustancias que puedan sobrecargar este órgano.
El ayuno moderado, como un ayuno de 12 horas entre la cena y el desayuno, puede ser una práctica beneficiosa para el hígado. Este periodo de descanso le permite regenerarse y desempeñar eficientemente sus funciones de desintoxicación y conversión hormonal.
Durante el ayuno, el hígado tiene la oportunidad de realizar su trabajo sin la carga continua de procesar alimentos, lo que puede mejorar la salud digestiva y favorecer un equilibrio hormonal saludable.
Infusiones recomendadas para el hígado que también pueden beneficiar la tiroides:
Infusión de cardo mariano: Protector y reparador hepático, con efectos antiinflamatorios. Esta planta es como un escudo para tu hígado. Contiene un compuesto llamado silimarina que ayuda a proteger y reparar las células hepáticas. Si tienes hipotiroidismo, particularmente de Hashimoto, puede ser especialmente útil debido a sus propiedades antiinflamatorias
Infusión de boldo: Mejora el flujo de bilis, ayuda con la digestión y eliminación de toxinas. El boldo es un aliado de confianza para tu hígado. Ayuda a que la bilis fluya mejor, lo que es genial para la digestión y para eliminar toxinas. Además, ayuda a metabolizar las grasas y puede contribuir a mantener a raya el colesterol, lo cual es beneficioso si tu tiroides influye en tu metabolismo.
Infusión de diente de león: Beneficia hígado, riñones y tiroides, rica en nutrientes. Esta planta es como un multiusos: ayuda al hígado, a los riñones y puede dar un pequeño impulso a tu tiroides. Es rica en nutrientes y puede aliviar la hinchazón y el estreñimiento, síntomas comunes en el hipotiroidismo.
Infusión de alcachofa: Limpia grasas y toxinas, y ayuda a controlar el azúcar en sangre. La alcachofa funciona como un depurador natural para el hígado. Ayuda a limpiar las grasas y toxinas, y es especialmente buena si tienes el hígado un poco «congestionado». Además, puede ayudar a controlar el azúcar en sangre, lo cual es útil si tu tiroides está afectando tu metabolismo.
Infusión de jengibre: Favorece la función hepática al estimular la producción de enzimas que ayudan a desintoxicar el hígado y mejorar la digestión de las grasas. Además, activa el metabolismo, gracias a sus propiedades antiinflamatorias. El jengibre es como una estufa para tu cuerpo, ayuda a calentar y activar tu metabolismo, lo cual es genial si tu tiroides está un poco perezosa. Su acción antiinflamatoria puede aliviar varios síntomas asociados al hipotiroidismo, y sus propiedades antioxidantes contribuyen a la protección de las células hepáticas.
Cuándo tomarlas y consideraciones:
Lo ideal es tomar estas infusiones entre comidas, preferiblemente por la mañana o a media tarde. Es importante dejar pasar al menos dos horas entre tu medicación para la tiroides y estas infusiones, para evitar interferencias tanto con el medicamento como con la digestión.
Estas hierbas también están disponibles en cápsulas, lo cual puede ser más práctico si tienes un estilo de vida ajetreado o no te gusta el sabor de las infusiones. Sin embargo, las infusiones suelen ser más suaves para el estómago y permiten una mejor absorción de algunos compuestos.
Consulta siempre a tu médico antes de incorporar nuevas infusiones o suplementos, especialmente si estás tomando medicación para la tiroides o tienes otras condiciones de salud. Es posible que estas infusiones requieran ajustes en tu medicación, por lo que es importante realizar análisis de sangre de forma regular.
Recuerda que estas infusiones son un complemento, no un sustituto de tu tratamiento médico.
HIDRATACIÓN
Beber agua y mantenerse hidratado es fundamental para la salud general del cuerpo, incluyendo el buen funcionamiento de la glándula tiroides. Aquí te resumo la importancia y cómo afecta la hidratación a la tiroides:
1. Metabolismo y Función Celular: La tiroides produce hormonas que regulan el metabolismo. Una adecuada hidratación facilita las reacciones bioquímicas en el cuerpo, optimizando el metabolismo celular y permitiendo que las hormonas tiroideas realicen sus funciones eficientemente.
2. Transporte de Nutrientes: El agua es esencial para el transporte de nutrientes y hormonas en el cuerpo. Los nutrientes como yodo y selenio, vitales para la producción de hormonas tiroideas, necesitan disolverse y ser transportados eficazmente mediante los fluidos corporales.
3. Regulación de la Temperatura: La hidratación ayuda a regular la temperatura corporal. Las hormonas tiroideas influyen en la producción de calor del cuerpo; por tanto, una buena hidratación permite una mejor regulación térmica.
4. Eliminación de Toxinas: Mantenerse hidratado ayuda a los riñones a eliminar desechos y toxinas del cuerpo, lo cual puede ayudar a prevenir problemas que podrían afectar la función tiroidea.
5. Reducción del Estrés Físico: La deshidratación puede incrementar el estrés físico y desencadenar problemas hormonales que afecten indirectamente a la tiroides. Mantener un estado de hidratación adecuado puede ayudar a mitigar estos riesgos.
En conclusión, mantenerse hidratado es fundamental para asegurar que todos los sistemas del cuerpo, incluida la tiroides, funcionen de manera óptima. Aunque la hidratación por sí sola no cura afecciones tiroideas, es una parte vital de un estilo de vida saludable que apoya la función tiroidea.
ANÁLISIS DE SANGRE
Es importante encontrar un profesional que evalúe todos los marcadores hormonales para obtener una visión completa de tu situación y poder ofrecer un tratamiento adecuado.
Al seguir estos puntos, puedes apoyar la salud de tu tiroides de manera efectiva y holística. Recuerda siempre consultar a un profesional de la salud para recibir una orientación personalizada y adecuada a tus necesidades.